I amar prestar aen El Mundo ha cambiado
han mathon ne nen Lo siento en el agua
han mathon ne chae Lo siento en la tierra
a han noston ned gwilith. Lo huelo en el aire
Mucho se perdió entonces y pocos viven ahora para recordarlo.
Galadriel (Cate Blanchett en El Señor de los Anillos: la Comunidad del Anillo, 2001, Peter Jackson)
El mundo ha cambiado, el cine está en de caída y las series de tv están en auge de audiencia y calidad.
Y la lectura no crece como nos anuncian, sólo el best-seller del momento, los libros se olvidan en las estanterías y pocos quedan para recordar lo que pasó en aquellas hojas de un escritor viejuno o muerto.
Ayer por la mañana abrí mi feed con la próxima serie del Señor de los Anillos.
Después de la próxima serie de la novela Fundación escrita por Asimov y que llevará a la tele Jonathan Nolan (sí, hermano de Christopher y su guionista de cabecera), esto puede ser lo más friki y emocionante visto en años después de Juego de Tronos y Los pilares de la tierra.
Todos quieren lanzar series propias, ya no sólo las plataformas audiovisuales como Netflix o HBO, o las propias televisiones privadas y públicas.
Por ejemplo Movistar, empresa de telefonía y servicios ahora lo quiere petar con su serie «original» La Zona que sólo con el tráiler me recuerda a la zona de Stalker (Andrei Tarkovsky, 1979) genial y espesa película rusa, relativamente antigua, basada en la novela de Arkadiy y Boris Strugatskiy del 1972. Pero la serie de momento, yo todavía no la he visto, es original de Movistar.
Mucho se perdió entonces y pocos viven ahora para recordarlo.
Amazon también dió salto a por el dulce de la televisión hace unos años. Si vendo teles porqué no series.
La FNAC creo ya edita libros. ¿Igual ya produce o se quiere lanzar a la TV también?
Pues el hueso de Amazon con la épica parece haber sido HBO con Juego de Tronos. En esa línea Amazon está en negociaciones con los propietarios de ESDLA: los herederos de Tolkien y la productora Warner, intentando conseguir un acuerdo para llevar la Tierra Media a la TV. De hecho Warner trabajaría con Amazon para su realización.
Pero el tema económico lo es todo hoy en día y después de los problemas con los videojuegos de Aragorn y del resto de la Comunidad, los propietarios quieren dejar bien atada una futura serie. Por ello de momento, sin money, humo.
El contenido o las historias de esta futura serie está bastante resuelto. O por lo menos de partida.
A JRRTolkien le pasa como a Crichton del que ya hablé hace poco. Dejaron un número finito de libros a su muerte pero la cantidad de apuntes, cartas, borradores, dan para muchos libros firmados a título póstumo que sus descendientes no han querido desaprovechar.
Además del Silmarilion y varios volúmenes de cuentos recientemente se publicó Los hijos de Hurín (2007) y ahora se han recopilado en un sólo volúmen todas las historias de Beren y Lúthien (2017).
Mis ganas de ver a Tom Bombadill Bombadillo en pantalla. Ansia viva. Nos quedamos muchos lectores con ganas de verlo en la primera trilogía, y nos quedó la esperanza del Hobbit. Nada. Quien sabe si en esta posible serie.
Aunque también pueden atajar el guión, pillar un dron de reparto de Amazon y tirar la cajita sonriente al fondo del monte del destino con un bonito anillo dentro.
Pero muchos Cuentos Perdidos al final se perderan de verdad y pocos viviran para recordarlo.
Las adaptaciones se venderán como originales y muchos las disfrutaran por primera vez.
Pero como con aquellas películas en blanco y negro, esperaremos al remake en color o a la adaptación de guión para desenpolvar relatos, y así recordar que una vez hubo un Anillo Único en forma de libro para retenernos a todos en la butaca de lectura.