La antigua Canal 9 está à punt para volver a sus emisiones.
Hoy inician una escueta parrilla de programación en la radio valenciana con interesantes programas culturales pero con mucho relleno musical y repeticiones.
Pero no aparecen en esa parrilla ni las noticias ni los deportes, uno de los alicientes de tener un medio autonómico para conocer al dedillo lo que pasa en los rincones de tu tierra, o informar las alertas si se dieran como en la nevada de la A3 del 2016.
Esto es sólo radio, porque la web en pruebas aparecerá el 18 de diciembre para cambiar por otra nueva más adelante. ¿Doble gasto?
La TV ni se sabe.
Lo peor es que la disolución de la antigua radiotelevisión todavía no está concluida por lo que también podrían convivir dos corporaciones autonómicas. ¿Más gasto?
Y la claridad de los contratos no parece ser que fuera la prometida. Los juzgados tumbaron unos pliegos que daban total preferencia a antiguos trabajadores excluyendo a posibles nuevos y o jóvenes empleados. ¿Costas judiciales y repetir los pliegos de contratación más gasto?
He leído que van a hacer un programa de música hecha en la comunidad, «en todos los idiomas»…
Decían en La vida es bella que el silencio es el grito más fuerte. Desde que cerraron las emisiones de radio días después de la TV, en mi dial del coche siempre he dejado sintonizado el antiguo Radio 9 con las interferencias. Hace 15 días descubrí con alegría que emitían música que me gustaba y la cabecera de «à punt».
… pero ahora me doy cuenta que no he escuchado música valenciana que no sea en valenciano.
Lo triste es ese fantasma de la continuidad en la manipulación del medio público, partidista y cultural. ¿Porqué sino no lanzar un pequeño noticiario libre de expresión?
La antigua Canal 9 está más bien para àpuntalar.