El pequeño Carl le quiso dejar un mensaje en el limpia del vehículo de Steven Spielberg.
No pude ver a Spielberg, pero le dejé una nota en su coche. Cruzo los dedos.

Pero se equivocó de coche:
Carl, dejaste la nota en el coche equivocado, pero uno de nuestros creativos nos la trajo. Felices de que estés emocionado por Ready Player One.
Por cierto, a Carl ya se te han adelantado en Londres.


Una respuesta a «Spielburgers»